France march

Por Juliana Villate Quevedo

El cuarto poder, los medios de comunicación, todo lo controlan y son vasallos al servicio de las potencias hegemónicas. Por eso nos desgarra lo ocurrido en Francia, por eso y porque nuestros referentes inconscientes influyen en la magnitud de nuestro dolor.

Fuera de que hemos tenido una educación que ha formado un pensamiento eurocéntrico o norteamericanizado que hasta ahora se está intentando descolonizar, París es un emblema de libertad, de belleza y de romance para todos; se encuentra en un lugar privilegiado en nuestros sueños y en nuestras evocaciones a todo nivel a diferencia de, por ejemplo, Siria, Kenya, el Libano o aún de nuestros campesinos o indígenas Colombianos y latinoamericanos.

Nos duele Siria, nos duele Kenya, nos duele el Líbano, nos duelen nuestros soldados mutilados y nuestros compatriotas desplazados, pero —increíblemente— es algo lejano, algo que no nos pertenece, que nunca ha estado asociado con nuestra vida cotidiana, con nuestra cultura, con nuestra educación , ni con nuestros sueños.

Cuando tenía unos 7 años vi una película: Los Aristogatos… desde ese día soñé con tener muchos gatos y con ese país mágico donde una torre que parecía una estrella iluminaba las chimeneas y las callejuelas empedradas. Creo que París representa el espacio donde todos mereceríamos vivir. Una ciudad hermosa, donde todo el mundo gana bien, donde hay una altísima calidad de vida para todos, donde no hay maltrato ni explotación laboral, donde la gente sabe que la vida es para disfrutar, para comer bien, para degustar una buena copa de vino, para la buena música, para la belleza del arte y de la arquitectura. Un sitio para ser libres y para vivir felices. Pero fuera del gusto estético y hedonista que representa París, creo que para todos lo que nos formamos dentro de la educación estructurada por parámetros eurocéntricos, Francia es referente.

En la infancia mi biblia era el Principito y me sabía de memoria las fábulas de la Fontaine, en la adolescencia lloraba con Jean Valjean, estaba enamorada del conde de Montecristo, de La Mole y de los cuatro mosqueteros, aprendí de la injusticia social con Bola de Cebo, con Quasimodo, con Germinal, papá Goriot, o Eugenia Grandet, aprendí de la condición humana con Ruy Blas de Santillana, Moliere o con Margueritte Yourcenar, lloré con Baudelaire, Rimbaud, Geraldy o Verlaine, aprendí del amor con Francoise Sagan, Merimee, Proust, Chateaubriand, Zola, Flaubert, Stendhal, Balzac y con la Duras; viajé con Julio Verne al centro de la tierra, hice veinte mil leguas de un viaje submarino e intenté la vuelta al mundo en 80 días.

Ideológicamente los movimientos de la Ilustración y de la revolución francesa con sus conceptos de «libertad, igualdad, fraternidad», así como la necesidad de luchar por los derechos humanos, los avances sociales de los siglos XIX y XX (los logros de los sindicatos en la limitación de la jornada de trabajo, salario mínimo y sistema de pensiones ) y el PROHIBIDO PROHIBIR de Mayo del 68 influyeron marcadamente en la ideología que aún hoy me conforma.

Aprendí a pensar con Baudelaire o con Sartre, con Voltaire, con Rousseau, con Camus, con Simone de Beauvoir, Boris Vian, Perec y con Marc Auge. Me atrae y trato de entender la filosofía de Tehilard de Chardin, Lacan, Althusser, Ricoeur, Deleuze, Barthes,Lyotard, Guattari, Baudrillard, Derrida, Foucault … Amo a Manet, a Monet, a Renoir, a Cezanne, a Matisse, a Dufy… Oigo a Satie, a Gounod, a Saint-saens, Berlioz, Ravel. Debussy, Bizet…. Me encanta el cine frances de Jean Jacques Annaud, Truffaut, Godard, Bresson, Chabrol, Rohmer, Malle,Besson, Ozon…. en fin….¿ Cómo no decir que Francia es referente ?

Hay ciudades o países (Nueva York, Paris, Roma, Buenos Aires, Cuba , España, México) que nos pertenecen a todos porque condensan demasiados recuerdos a nivel subliminal dados por vacaciones soñadas, recuerdos exaltados, arquitectura, literatura, cine, teatro, ballet, danza, escritores, música, arte.

Por mucho que quisiésemos llorar por todos los muertos de todas las guerras es inevitable llorar por los que sentimos más cercanos, es inevitable llorar más por los senderos recorridos (así sea desde el imaginario dado por las letras y las artes) que por los no transitados.

Sospecho que estamos constituidos por fragmentos de todo lo que hemos leído, visto, oído, vivido y soñado. En esa medida una bomba hace saltar también fragmentos dentro de nosotros… pedazos de nuestro inconsciente que no teníamos claros, que no recordábamos… que tal vez ni siquiera sabíamos tan cercanos!


 

Juliana Villate QuvedoJuliana Villate Quevedo Nacida en Bogotá, vive en Cali. Médico Psiquiatra de la Pontificia Universidad Javeriana. Viajera, escritora, lectora, cinéfila y filósofa empedernida. Amante del arte de deconstruir esquemas de pensamiento paradigmático. Mas que una síntesis de diferentes corrientes del pensamiento, busca , desde su propia vivencia, sumada al conocimiento del funcionamiento inconsciente de los seres humanos, una explicación práctica que sea fácilmente asimilada por cualquier persona, de cualquier lugar, con cualquier tipo de formación. Ha publicado «Consejos para padres y niños del hada de los tres pelos» (profesional) y Mas allá de la piel ( textos introspectivos). Sus cuentos han sido publicados en diversas antologías nacionales e internacionales.